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Debido a las altas temperaturas que se experimentan en el verano, muchas veces buscamos pasar más tiempo en espacios con aire acondicionado para escaparnos de la sensación de calor y bochorno que se siente en la calle. Si bien estos equipos nos ayudan a mantenernos frescos, pueden generarnos sequedad ocular. La Dra. Harumi Burga, oftalmóloga especialista en Segmento Anterior de nuestra clínica, nos brinda mayor detalle acerca de la relación entre el ojo seco y el aire acondicionado.
¿El aire acondicionado puede desencadenas en ojo seco?
Los ojos deben mantenerse hidratados para proteger el globo ocular, eliminar cuerpos extraños y para que no se afecte la calidad de visión. Cuando permanecemos en ambientes climatizados favorecemos la sequedad ocular debido a que las lágrimas que protegen las superficies de los ojos permanecen menos tiempo y esto origina ojo seco.
El aire acondicionado puede causar o empeorar los cuadros de ojo seco (enfermedad multifactorial caracterizada por una lágrima instable o insuficiente); ya que el aire que genera es mucho más seco de lo normal y produce una rápida evaporación de la película lagrimal.
¿La sequedad ocular afecta a todos los pacientes por igual?
La sequedad ocular no afecta a todas las personas de la misma manera. Fumar, permanecer largas horas frente al computador o celular puede agravar esta condición, que se caracteriza por causar irritación, ardor y picazón en los ojos, sensación de arenilla, lagrimeo, visión borrosa, sensibilidad a la luz, entre otras molestias.
Nuestra especialista recomienda:
Si visita con frecuencia o permanece largo tiempo en ambientes con aire acondicionado o con baja humedad como oficinas, locales comerciales o bancos puede aplicarse gotas lubricantes o lágrimas artificiales. Sin embargo, su frecuencia de uso debe ser prescrita por el oftalmólogo.
Darse pequeñas pausas, si trabaja frente al computador, también evita que el ojo seco empeore.
Manténgase hidratado y aléjese de las personas que fuman.
RECUERDA:
El ojo seco es una enfermedad que puede obedecer a ciertos factores y, algunas veces, incluso puede ser asintomático. Por ello, es muy importante visitar al oftalmólogo para un chequeo anual. No te automediques, podrías agravar el cuadro.